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Dirección y edición por Pablo Sanz y Stéphane Groussaud


Las cosas cambian pero yo estoy donde siempre,
en la misma calle donde pisé por costumbre,
nada es como antes, ciclos en su constante,
abro la ventana para ver lo que hay enfrente.
Aquí el suelo tiene el mismo color que el aire,
donde cada noche puede ser irrepetible,
salir ahí fuera ya no es fácil para nadie,
es tu mirada que se torna indescriptible.
Días que caen como angustia en Malasaña,
aprendí mucho solo y ahora a mí nadie me enseña,
me acostumbré a besar para después perder,
y hoy por el Penta pasará la chica de ayer.
Labios que se tocan en una fila del Roxy,
el tema de mi tesis, buses y taxis,
mentes frágiles detrás de curvas sexys,
de tu insurrección hasta mi apoteosis.
Ella le dijo que 'Como tú hay miles',
y otro suceso sucede en Arapiles,
diles que no estoy por si me encuentran,
chinos cuadran cuentas en un piso en Ventas.
Frunzo mi ceño si pega el sol en mi rostro,
estoy con Freddy dando vueltas por el Rastro,
lejos de tu cielo y cerca de mil atascos,
en medio del infierno cojo un poco de aire fresco.

Abro la ventana, sólo veo ruina,
tengo que dar gracias que en mi plato hay comida,
no sé si serán sus calles o serán sus plazas,
te llevo en la sangre, a mí Madrid me mata.

Fuera de tu área y de tu patrón a seguir,
esto no se parece al sitio donde yo nací,
estoy cantando mientras luchas por salir de aquí,
sigo con mi empeño de cuidar un poco más de mí.
He visto a estas alturas demasiadas cosas feas,
escribo realidad en cada una de mis letras,
maté a la soledad para que aquí no quepa
y fue por ti aunque tú no lo sepas.
Gritos, traiciones, torcí mis renglones,
cambié de planes por causas ajenas, cojones,
estas paredes me liberan cada noche,
chupas y parches, trapicheos en un coche.
Yo sueño con avanzar, hoy cojo la circular,
me pongo el auricular y es cuando empiezo a volar,
caras conocidas en la barra del Molar,
y en la 103 del Ritz pone no molestar.
La suerte para hoy, rap es lo que hay,
de la Ruda hasta que llego a Nicolás Godoy,
por ti yo sigo, por esto mato y vivo,
como el yonqui del 82 en los Olivos.
La vida sale cara y tú demasiado barata,
mi acera baila y mi mente con cosas ingratas,
el humo flota, el tiempo que te ata,
siempre falta plata, Madrid me mata.

Abro la ventana, sólo veo ruina,
tengo que dar gracias que en mi plato hay comida,
no sé si serán sus calles o serán sus plazas,
te llevo en la sangre, a mí Madrid me mata.


Letra y voz por Nársil
Estribillo por Cali
Música por Mokhardo
Scratches por DJ Saum
Grabado, mezclado y masterizado por Mokhardo en La Casita Baja


Perteneciente a 'Madrigal' de Estilográfico


Descarga 'Madrigal' en http://estilografico.bandcamp.com/album/madrigal