29 de Diciembre de 1991, la caja de ritmos de Negu Gorriak golpea los muros de la prisión española de Herrera de la Mancha. Es el primer concierto de la banda. Allí a cientos de kilómetros de casa y junto a miles de personas denuncian la dispersión que sufren los presos políticos vascos y muestran su solidaridad con ellos. Acompañados por el bajista del grupo Anestesia, Mikel Kazalis pronto uno mas del grupo, Fermin, Iñigo y Kaki repasan el repertorio de su primer disco y pasan por su filtro el villancico popular vasco "Hator, Hator". Manolo Gil plasma en este video el concierto testimonial de una banda todavía por crecer en una jornada intensa.