Melocos

Melocos es una banda de Pop-Rock española procedente de El Puerto de Santa María, Cádiz, formada por cinco jóvenes de edades comprendidas entre los 21 y los 23 años: Jaime Terrón (voz), Gonzalo Alcina (guitarra), Manu Jurado (guitarra), Andrés Ortiz (batería) y Antonio Suárez (bajo).



Los componentes de Melocos comenzaron su trayectoria profesional actuando en varios locales y en varias ferias de pueblos cercanos al suyo durante meses. De ahí empezaron a expandir sus conciertos por algunos locales de la noche madrileña (Chesterfield, sala la SAL.) y en el Colegio Mayor San Juan Evangelista, más conocido como 'El Johnny'. Finalmente en el 2006 graban una maqueta que les llevaría a firmar con la compañía discográfica Sony BMG/Peps Records. A partir de ese gran momento para la carrera de este grupo, comienzan un laborioso proceso de grabación en el estudio de grabación de Madrid bajo la dirección de Alejo Stivel.



El 20 de Febrero del 2007 sale a la venta su primer EP 'Melocos' debutando con su tema Cada Golpe. Los Secretos colabora en alguna de sus canciones. Los temas tienen influencias de los Despistaos, Maná, Jaime Anglada, El Canto del Loco y Hombres G. Unos temas frescos, que tratan sobre la amistad, el amor, vivir el momento.



Tras el éxito de su primer disco, Melocos publica el 31 de marzo su segundo álbum "Somos". Producido por Fernando Montesinos, es una colección de estupendas canciones que van desde el power-pop con riffs rocanroleros a ciertos apuntes brit, pasando por algo de reggae-ska, temas de construcción clásica, ritmos muy potentes que se alternan con baladas con orquesta. Todo tocado y cantado con una precisión y una contundencia que dejan bien claro que Melocos se lo ha currado y que la larga gira con su exitoso primer álbum les ha venido de perlas: nada mejor que tocar mucho para tocar bien.



Las canciones de Somos son para prestar atención porque, manteniendo el espíritu del pop, siempre tienen algo diferente. Se diría que Melocos se sienten incómodos si los temas se ciñen a lo habitual, que necesitan sorprender con cambios constantes en los desarrollos, de manera que salen por donde menos se espera. En Melocos raras veces hay estrofa-estribillo-estrofa y sus composiciones siempre buscan lo inédito, lo imaginativo. Algo que se agradece y que sitúa a Melocos en un terreno propio, muy poco trillado.